Las coincidencias no existen, para nada, yo creo que esas
llamadas coincidencias son más bien una oportunidad para hacer algo que no
lograste hacer; o me vas a decir que es mucha “coincidencia” que para presentar
el examen de estado, en mi ciudad hay aproximadamente quince colegios, hay miles salones y justo
me toca en el mismo salón, con la persona por la que más llore y sigo llorando, por la que más
sentí y sigo sintiendo porque la vida no me la borra tan fácil de mi cabeza. Esa fue la oportunidad perfecta para arreglar todo lo que no pude hacer
porque lo hice sufrir un poco pero lo hice, soy culpable de muchas cosas que cause por esa persona y fue la oportunidad
perfecta para agachar la cabeza y pedir perdón.
¡Las coincidencias no existe! Cuando tengas una de estas oportunidades, aprovéchala
porque ten por seguro que Dios te la puso en el camino por algo, porque esa
oportunidad que yo tuve, no la aproveche.
Toma la iniciativa, y empieza TÚ
JUDY CAMILA CERON CAMAYO
-BOGOTA-
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